Educar a los niños a una correcta alimentación ¿Cuánto influye en su desarrollo?
Esta es la cuestión: educar a los niños de una manera adecuada. Los niños, como niños que son y recién venidos al mundo, no saben hablar, no saben escribir… . Tienen que aprender a hacer muchas cosas, entre ellas aprender a comer. El niño no decide qué comer, nosotros le estamos dando la comida. Tenemos la responsabilidad y obligación de alimentarle de forma sana y equilibrada y enseñarle a comer correctamente.
Es fundamental que primero los padres aprendamos a comer de forma sana y equilibrada para luego poder enseñar a alimentarse bien a nuestros hijos. De esta manera le otorgaremos algo así como un seguro de vida. A través de una alimentación sana y equilibrada estamos asegurando un futuro mejor al adulto de mañana. No olvidemos además que una alimentación adecuada influye tanto a nivel físico cuanto a nivel psíquico. Ofreciendo a los niños de poder disfrutar de una “mens sana en corpore sano” durante una larga vida.
¿Qué sucede cuando acostumbramos a nuestros hijos a comer lo que ellos quieren sin proporcionarle una alimentación adecuada?
Estamos condenando a nuestros hijos a tener diferentes enfermedades cuando sean adultos o incluso antes. No hay que olvidar lo que antiguamente afirmaban los griegos “tu alimento sea tu medicina y tu medicina sea tu alimento”. Esto quiere decir que está tan relacionada la forma de alimentarse con la enfermedad que es algo que deberíamos tomarnos de manera muy seria. Enseñar a nuestros hijos lo que tienen y lo que no tienen que comer significa beneficiarle con un “seguro de salud”.
Dejar que los niños coman sin regla y abusen de azucares significa exponerles a un riesgo de hiperactividad asociada a intervalos de somnolencia que son espías de un mal funcionamiento del páncreas. Si un órgano trabaja de manera acelerada a medio o largo plazo dejará de funcionar de forma correcta.
Podemos comparar el cuerpo humano a un coche. Si nada más adquirir un coche empiezo a acelerar y acelerar, estoy haciendo que el motor trabaje demasiado. Ese motor que está preparado para durar 100.000 Kilómetros durará solamente 50.000 Kilómetros. De la misma forma si sometemos los órganos a un excesivo esfuerzo les estamos acortando la vida y a largo plazo exponiendo el cuerpo, al riesgo de graves enfermedades.
En las escuelas sería muy recomendable añadir una asignatura más. Porque, así como el aprender a leer y a escribir es sumamente importante, aprender a alimentarse de forma correcta, lo es también.
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